Conducir en invierno implica asumir y poner en práctica una serie de medidas que nos sirvan para garantizar un nivel óptimo de seguridad y comodidad. Es cierto que agentes externos como las precipitaciones aumentan los riesgos y nos dificultan la tarea, pero ajustando la velocidad a los máximos permitidos, poniendo a punto el vehículo y evitando maniobras bruscas, podremos disfrutar de una experiencia diferente, rutas invernales.
¿Eres de los que se entusiasman poniéndote al volante en esta época del año para hacer kilómetros por carretera? Entonces, seguro que las cinco rutas por la nieve que vamos a proponerte te permitirán exprimir al máximo tu pasión a la par que descubres nuevos lugares llenos de magia.
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1. La Alpujarra granadina y sus pueblos blancos
Andalucía es un destino muy solicitado por los turistas que buscan sol, descanso y buena gastronomía. Sin embargo, esta comunidad autónoma tiene mucho más que ofrecerte. Por esta razón, hemos decidido incluir la Alpujarra granadina entre nuestras rutas invernales recomendadas. Precisamente, Sierra Nevada y los pueblos que conforman esta comarca son lugares que habitualmente se visten de blanco en invierno.
Si decides completarla, coincidirás con nosotros en que conducir en invierno por esta zona es una experiencia única. El Barranco de Poqueira, constituido por los pueblosBubión, Campaneira y Capileira, se ubica en el corazón del territorio alpujarreño de esta provincia y salpica un paisaje típico de casas encaladas de blanco y la armonía propia de estos singulares entornos.
En la Alpujarra también podrás practicar actividades al aire libre como el senderismo y visitar bellos lugares, como el pico del Veleta. Lanjarón, Órgiva y Trevélez son otros municipios que merece la pena conocer. También deberías dar una vuelta por Soportújar, conocido como el pueblo de las brujas y que encierra numerosas y apasionantes leyendas.
2. Rutas por la nieve en el País Vasco
Desde el sur nos vamos directamente al norte para proponerte algunas rutas invernales en el País Vasco. Se trata de otra de las comunidades de España donde es habitual que en esta estación del año se produzcan estas precipitaciones. Álava, Vizcaya y Guipúzcoa son provincias que vale la pena recorrer si te apetece empaparte de la cultura vasca y sumergirte en sus costumbres.
Por supuesto, una de nuestras sugerencias pasa por conducir en invierno para visitar San Sebastián, Bilbao y Vitoria. Las tres capitales son un imprescindible al que hay que añadir otros puntos muy interesantes, como las reservas naturales de Gorbea, Urkiola o Urdaibai. Entre los sitios más bonitos del País Vasco que te podemos recomendar, también tenemos la bahía de la Concha, San Juan de Gaztelugatxe o la selva de Irati.
3. Conducir en invierno por el Pirineo aragonés, una experiencia única
No es necesario tener vacaciones para disfrutar de una escapada en la que conocer nuevos lugares en España repletos de atractivos paisajes, patrimonio cultural y otros muchos reclamos. Así que si no vives demasiado lejos y te lo puedes permitir, te proponemos que te plantees una ruta por el Pirineo aragonés, donde conducir en invierno se convierte en una experiencia única.
Todo dependerá del tiempo del que dispongas, pero, en cualquier caso, no podemos dejar de recomendarte lugares como Benasque, Cerler, Aínsa, Torla, Jaca y Ansó. Una ruta por estas localidades que se sitúan en las inmediaciones del Macizo de la Maladeta, el valle de Ordesa, Patrimonio de la Humanidad, o el valle de Tena, te permitirá retroceder hasta el siglo XVI por la particularidad de sus construcciones.
4. La Costa Brava en invierno, un escenario de película
La Costa Brava es una zona a la que todo el mundo acude en verano, ya que es uno de los principales puntos de interés turístico de nuestro país para aquellos que viajan en busca del mar. Sin embargo, pocos son quienes se lanzan a descubrirla en invierno, una época del año en la que sus parajes se convierten en verdaderos escenarios de película.
Por eso, si te gusta ir a paso cambiado respecto al resto del mundo, puede ser una ruta más que interesante. Es poco probable que encuentres nieve, pero sí lugares tan sugerentes como Begur, Tossa de Mar o Sant Feliu de Guixols. Además, al tratarse de temporada baja, podrás disfrutar de precios más económicos.
Una buena opción es que vayas por todo el litoral gerundense desde Blanes hasta el cabo de Creus hasta completar la llamada Ruta El Año. Recibe este nombre porque cuenta con 365 curvas, mismo número de días que tiene un año. Eso sí, extrema precauciones y practica una conducción responsable.
5. Castilla y León para descubrir los secretos de la España profunda
Si eres un apasionado del turismo cultural, esta última propuesta te resultará muy interesante. Castilla y León es una comunidad repleta de ciudades con un patrimonio monumental y cultural enorme, que encierran muchos de los secretos de la España más profunda. Nuestra recomendación es que tu recorrido pase al menos por Zamora, León, Ávila, Salamanca y Burgos.
Astorgay su Palacio Episcopal -obra de Gaudí-, Ponferraday su castillo templario del siglo XII o Benavente y las espectaculares vistas que ofrece el mirador de La Mota son lugares que también debes añadir a tu lista. Puedes acabar en Toro, donde se sitúa la sede de las Cortes de Castilla, y que está en plena vega del Duero. Y si lo que te motiva es completar rutas por la nieve, en León puedes visitar las estaciones de San Isidro y Leitariegos.
Haz que tu viaje sea perfecto
Sin duda, conducir por todas estas rutas invernales es una experiencia que merece la pena vivir. Por ello, te insistimos en que tomes nota y las hagas en cuanto te resulte posible. Te garantizamos que no vas a arrepentirte.
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