¿Te gustaría que tu coche luzca tan brillante como recién estrenado? Cuidar la pintura de tu vehículo es tarea fácil. Atento a los consejos que te ofrecemos desde Norauto para que tu coche brille con luz propia.
Elige aparcamientos cubiertos
Altas temperaturas, lluvias torrenciales, nieve, granizo… Las condiciones meteorológicas pueden dañar, y mucho, la pintura de tu coche. También las resinas de los árboles y los excrementos de aves. Aparcar en lugares cubiertos debe ser, por tanto, tu primera opción. Y si tienes garaje, que no te de pereza entrar el coche, ¡aunque sólo sea para un ratito!
Aparca con cuidado
La falta de espacio, las prisas y la falta de cuidado, nuestro y sobre todo de otros usuarios, pueden provocar pequeños desperfectos en la pintura. Busca espacios amplios y fáciles para aparcar, lejos de aglomeraciones, siempre que te sea posible.
Y si tienes una plaza de garaje justa, utiliza protectores para columnas, paredes y zonas conflictivas.
Protege tu coche de la intemperie
Si no tienes garaje, una funda protectora exterior no te vendrá nada mal para resguardar tu vehículo del sol, salitre, humedad… ¡Son grandes enemigos de la pintura!
Lava el coche con frecuencia y con productos que no dañen
Ya no sólo por estética, sino porque los restos de insectos, los excrementos de pájaros, las resinas de árboles, entre otros, van deteriorando la pintura. Así que te interesa quitarlos cuanto antes. Mantener limpio tu vehículo cuidará la pintura y evitará la corrosión.
Pero, ¿lavado manual o automático? La Limpieza a mano es lo más recomendado por ser menos agresiva. Eso sí, elige productos que no dañen. ¡Una buena gamuza, jabón de ph neutro y agua de baja mineralización serán bienvenidos!
¡Importante! No debes frotar las manchas y restos en seco ya que puedes rallar la pintura. Tampoco dejes secar el coche al sol. Los rayos ultravioleta afectan al brillo de la pintura y pueden provocar el matizado progresivo de la pintura de tu coche.
Encerar y Pulir
Encerar el vehículo al menos 2 veces al año contribuirá a proteger la pintura. Si añades un pulido cada tres años, por ejemplo, conseguirás que luzca como el primer día.
No tardes en reparar los daños que afecten a la pintura
Así evitarás que la porción expuesta se oxide y dañe profundamente la carrocería.
También debes saber que en el mercado existen productos que te ayudarán a mantener la pintura de tu vehículo como el primer día, como los renovadores que limpian y reavivan la pintura de coche devolviéndola el color original.
Fácil, ¿verdad? Ya no tienes excusa, ¡protege la pintura de tu coche!