Lo primero que queremos que sepas es que si vas a cambiar tus llantas, puedes elegir unas llantas compatibles con tu vehículo, o no, y en este segundo caso tendrás que homologar su montaje en la ITV.
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¿Cómo saber si las necesito homologar o no el montaje de mis llantas en la ITV?
La ITV comprobará que el ancho de vías de tu coche sea similar al que viene en la ficha técnica de tu vehículo. Las llantas que montes no deben exceder en más 30 mm el ancho de vía* indicado por el constructor.
Ancho de vía*: Es la distancia del centro del vehículo al centro de la banda de rodadura de cada neumático. La anchura de vía puede ser diferente para cada eje (no tiene por qué ser la misma medida delante y detrás).
Si escoges unas llantas que aumenten el ancho de vía en más de 30 mm, la inspección ITV será desfavorable y tendrás que homologar el montaje de tus llantas.
La ley permite variar el ancho de vías de tu vehículo, pero sólo dentro de un límite: +60 mm en turismos y +150 mm en todoterreno.
En resumen: puedes cambiar las llantas de tu vehículo sin necesidad de homologar siempre que:
- No excedas la anchura de vías en 30mm
- No sobresalgan de la carrocería de tu vehículo
- Las llantas no toquen ningún otro elemento mecánico (frenos, pasos de rueda, etc.)
Una vez aclarado este tema, veamos los elementos a tener en cuenta ahora para elegir una llanta.
¿Cómo elegir las llantas?
Elegir unas llantas puede convertirse en un dolor de cabeza cuando no somos muy entendidos. Buje, distancia entre tornillos, desplazamiento… ¿qué significan todos esos términos técnicos?, ¿Cómo utilizarlos para elegir correctamente una llanta? Desde Norauto queremos ayudaros resolviendo todas estas dudas.
Anchura de la llanta (también llamada garganta)
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Se mide en pulgadas y es la otra medida que complementa el tamaño de la llanta. Es la distancia entre los dos lados de la llanta. El ancho siempre va unido al diámetro de la llanta, mostrando siempre la información en pareja, como por ejemplo 7×17″, 7.5×17″, 8.5×19″ etc.
El diámetro
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Es el diámetro de la llanta (en pulgadas).
Para conocer el diámetro de la llanta adecuada y compatible con tu vehículo es necesario tener en cuenta el diámetro de tus neumáticos. Si quieres saber dónde encontrar el diámetro de tus neumáticos pincha aquí. Si quieres aumentar el diámetro de tus llantas de origen para personalizar más tu vehículo, pregunta a uno de nuestros vendedores para escoger el modelo de llanta y los neumáticos compatibles con tu vehículo.
Anclaje o PCD (distancia entre tornillos)
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Es una medida que tiene 2 partes, la primera de ellas es muy sencilla de averiguar, pues es el número de agujeros que tiene nuestra llanta. Si nuestra llanta tiene 5 agujeros, nos indica que necesitaremos 5 tornillos para instalarla.
El siguiente dato es algo más complicado de averiguar, se refiere a la circunferencia que se crea entre los puntos centrales de estos agujeros, por ejemplo 100, 112, 114.3, 120… Este dato suele estar grabado en la parte trasera de la llanta (verás que pone PCD), y si no lo está, podemos utilizar herramientas como la de la foto para averiguarlo.
Normalmente cada constructor utiliza un anclaje en todos sus coches, o bien utiliza un par de anclajes diferentes para coches de distintos tamaños o pesos. Volkswagen utiliza por ejemplo un PCD de 5×112 en casi todos sus modelos. Y hay otros constructores que pueden utilizar este mismo PCD. Éste es el caso de Seat, Audi o Skoda, que como pertenecen al grupo Volkswagen utilizan el mismo anclaje. Esto quieres decir que las llantas serán compatibles entre estas marcas.
Buje (o apoyo de la llanta)
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El buje es el agujero central que tiene la llanta, y ha de tener exactamente de la misma medida que el buje del coche.
Puedes elegir una llanta con un apoyo cuyo diámetro sea superior al diámetro del buje de tu coche, pero esto podría causar vibraciones.Este problema puede solucionarse utilizando anillos centradores que sirven para reducir el diámetro de apoyo de la llanta hasta que ajuste bien con el buje de tu coche.
Así pues, puedes comprarte una llanta con buje directo (el agujero central de la llanta encaja con el buje de tu coche), o no, y utilizar anillos centradores para reducir la distancia entre el círculo central de apoyo de la llanta y el buje.
Desplazamiento (ET)
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Es la distancia entre la superficie de apoyo de la llanta (la parte exterior de la llanta) y el centro del ancho de la llanta.
Es una medida muy importante a tener en cuenta para elegir tus llantas, pues es la principal causante de que una llanta no sea compatible con tu vehículo. Puede que hayas escogido una llanta con el anclaje (distancia entre tornillos), pero si el ET no es el que el fabricante recomienda para nuestro coche, la llanta podría chocar con la pinza de freno, con la suspensión del vehículo, salirse del ancho de vías permitido o incluso aumentarlo tanto que sobresalga las llantas de la carrocería.
Cuanto menor es el desplazamiento, más sobresale la llanta de la carrocería del coche.
Cuanto mayor es el desplazamiento,menos sobresaldrá la llanta del vehículo.
La anchura, el diámetro, la distancia entre tornillos y el desplazamiento (ET) son diferentes en cada vehículo.
Si quieres encontrar llantas compatibles con tu vehículo, sólo tienes que utilizar nuestro selector de llantas.
Homologar el cambio de neumáticos y llantas
Si las llantas elegidas no cumplen estos requisitos, entonces tendrás que homologar el cambio de llantas y neumáticos en la ITV.
Necesitarás la siguiente documentación: tres fotos del producto montado (de frente, vista posterior y perfil), los datos del material comprado (llantas, neumáticos y separadores) y las medidas finales del vehículo (ancho de vías anterior y posterior).
Material de las llantas
Llantas de acero
Son las llantas más utilizadas llantas en vehículos comerciales o modelos de gama baja y media. Presentan buenas cualidades mecánicas y un bajo coste de fabricación. Destacan por ser resistentes, sobre todo en invierno, pues el frío, o la sal que se echa en las carreteras puede afectar a la resistencia de las llantas. Resisten bien los golpes contra los bordillos por ejemplo y en ella se nota menos la suciedad y muy fáciles de limpiar. La desventaja: son más pesadas, y la resistencia del acero no permite diseños atractivos como el diseño de radios. Estas llantas suelen cubrirse con tapacubos.
Otra desventaja sería su aireación, las llantas de acero tienen peor refrigeración de los frenos, ya que el aire no circula adecuadamente.
Llantas de aleación (o llantas de aluminio)
Son las más utilizadas, una buena opción sea cual sea tu coche.
Las denominamos de aluminio porque están construidas normalmente con una aleación de varios metales, entre los que predomina el aluminio. Las llantas de aluminio son ligeras, tendrás la sensación de un mejor manejo del coche y de mejor suspensión. El aluminio libera parte del calor que viene de los neumáticos y hay también una mejor aireación del sistema de frenado.
Sus desventajas: la corrosión que tiene lugar a largo plazo si no limpias frecuentemente las llantas. Presta atención igualmente a utilizar productos de limpieza de llantas sin ácido .El aluminio, al ser menos resistente que el acero, también hará que sean menos resistentes ante golpes y que sean más difíciles de reparar.
Llantas de magnesio
El magnesio es el material más ligero y resistente para la fabricación de llantas. Las llantas de magnesio son por tanto una opción bastante más costosa en precio y suele utilizarse prácticamente en el entorno de la Fórmula 1 o rallyes. Sus desventajas: se rompen con más facilidad, son más difíciles de reparar y les afecta más la corrosión que a las llanta de aluminio por ejemplo.
Llantas de fibra de carbono
Sus ventajas: son un 20% más resistentes y un 20% más ligeras que las llantas de aluminio. También son más rígidas.Su modelado se hace por ordenador y utilizan estructuras de materiales optimizadas para obtener un producto muy preciso. Es cierto que también son bastante caras, las verás sólo en modelos muy exclusivos como el Porsche 911 Turbo S Exclusive Serie. El precio de estas llantas puede ser de unos 15.000 euros…
Procesos de fabricación
Podemos agrupar los procesos de fabricación de una llanta en 4:
Fabricación en molde por gravedad
Es el más sencillo, se introduce el metal fundido en un molde con la forma de la llanta, se deja enfriar y se extrae del molde.
Por inyección
Se inyecta el metal fundido a presión en un molde cerrado al vacío
Este proceso asegura un llenado más rápido y una mejora en las propiedades de la llanta. El resultado es una llanta más resistente.
Tratamientos térmicos
Los dos procesos de fabricación anteriores pueden combinarse con tratamientos térmicos. La llanta semi-acabada se calienta a temperaturas que pueden alcanzar los 400-600 grados. Éset método proporciona a las llantas más homogeneidad y mejora las características de la aleación, sobre todo en cuanto a resistencia ante impactos.
Por forja
La llanta se obtiene a partir de una pieza de aluminio redonda que se deforma cuando una prensa de gran tonelaje con un molde con la forma de la llanta cae sobre ésta. Este proceso da como resultado llantas de gran calidad, sin porosidades y con muy buenas propiedades de resistencia. Con este método se pueden hacer por ejemplo radios más estrechos sin perder resistencia. Estas llantas son muy exclusivas, suelen hacerse sólo por encargo y pueden llegar alcanzar los 1.000 € la unidad.