Con el paso del tiempo, aparecen los inevitables y temidos arañazos en la carrocería del coche. El roce con una columna del parking, con otro coche al aparcar o el típico golpe cuando el coche contiguo abre la puerta… Esos pequeños desperfectos distorsionan la estética del coche, pero repararlos en un taller especializado puede salirte caro. Por eso, te vamos a explicar cómo reparar los arañazos del coche tú mismo, de manera detallada.
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Tipos de arañazos del coche
En primer lugar, vamos a ver los tipos de arañazos del coche más comunes y, en función de cada uno, deberás actuar de una manera u otra.
Básicamente hay tres tipos de arañazos: los más pequeños o micro arañazos, los leves y los graves. Los más pequeños suelen ser provocados por no lavar y secar el coche correctamente. A veces pueden ser tan pequeños que son difíciles de percibir a simple vista.
Los daños leves son los más comunes. Son aquellos que no han atravesado la capa del color y, por tanto, no llega a verse el acero. Son los arañazos típicos provocados por unas llaves, una rama o cualquier otro objeto.
Por último, los desperfectos graves son los más profundos, aquellos que permiten ver un color diferente al de la pintura o el acero de la carrocería. Se aprecian desde lejos y son los más difíciles de reparar.
Herramientas para reparar arañazos
Antes de ponerte manos a la obra, debes saber qué herramientas vas a necesitar para reparar los arañazos del coche.
- Un pincel de retoque para ocultar el arañazo y repintar la superficie. En el manual del vehículo suele aparecer el tipo de pincel adecuado para el coche.
- Una lija con almohadilla para lijar la superficie y quitar el arañazo.
- Un pulimento para preparar la superficie del arañazo para su posterior lijado.
- Una pulidora para pulir.
- Y un abrillantador de pintura para encerar la superficie y darle brillo.
Reparar los arañazos del coche paso a paso
A continuación, te explicamos cómo reparar los arañazos del coche en diez sencillos pasos:
- En primer lugar, localiza el arañazo y utiliza un paño, un poco de agua y jabón para limpiar la superficie. Si reparas el daño con el coche sucio, provocarás más desperfectos.
- Con papel o periódicos viejos, empapela las zonas anexas al arañazo que vas a reparar, para que no se manche de pintura. Si es necesario, cubre también otras zonas como los intermitentes, faros, superficies cromadas que pueda haber, etcétera.
- Ahora coge el pincel de retoque y aplícalo sobre los arañazos muy suavemente. Espera durante 15 minutos a que se seque. Luego empapa la chapa con un spray y usa una lija de grano fino sobre el arañazo para allanar la superficie, hasta que la superficie quede totalmente lisa.
- Limpia la zona con un paño húmedo y sécala. Ahora debes proceder a la imprimación de la zona con un spray. Primero una capa y, cinco minutos después, añade otra. Tras cinco minutos, la imprimación se habrá secado. Ahora tienes que eliminar las asperezas de la imprimación con una lija extrafina.
- Vuelve a limpiar la superficie con una gamuza seca y limpia.
- Ahora coge el pulimento y échalo en la superficie donde hayas lijado para eliminar cualquier arañazo que hayas provocado por la lija. Esto dejará la zona preparada para pulirla.
- Llega el momento de pulir. Utiliza la pulidora en el nivel más bajo y pule la zona del arañazo durante 10 segundos, evitando pulir el mismo punto durante más de un segundo para no deteriorar la pintura.
- Después de pulir, vuelve a limpiar el coche con agua y un trapo limpio, asegurándote de limpiar todo el pulimento para que luego no se pegue a la pintura y ya no puedas quitarlo.
- Llega la fase del encerado. Utiliza una esponja húmeda, echa cera y aplícala en la zona del arañazo, de manera suave y con movimientos circulares.
- Por último, lava el coche de nuevo para que no quede ningún resto de suciedad.
Consejos para reparar arañazo
Ya has visto cómo reparar los arañazos del coche, pero, para que el resultado sea perfecto, es necesario que sigas lo siguientes consejos:
Lo primero que te recomendamos es que, si es la primera vez que vas a reparar los desperfectos de un coche, practiques antes en otro vehículo viejo. Si te equivocas, es mejor estropear un coche viejo que el tuyo nuevo.
Por otro lado, evitar reparar los daños del coche en la calle. Lo mejor es utilizar un espacio cerrado donde no haya corrientes de aire, como un garaje. El aire contiene elementos como motas de polvo, resina de los árboles, insectos, etcétera, que podrían adherirse a la pintura y provocar que el resultado final sea contrario al que buscábamos. Si no tienes garaje, puedes alquilar box. Si haces el trabajo en tu garaje, debe haber ventilación, ya que los aerosoles de pintura son tóxicos.
Si restauras un arañazo en una zona en concreto, por ejemplo, una aleta, no basta con pintar únicamente la zona del arañazo, sino que deberás pintar toda la aleta para que la pintura se vea uniforme.
Si la chapa está deformada por alguna abolladura demasiado profunda, puedes utilizar masilla especial de carrocería para corregir el desperfecto. Tras aplicar la masilla y después de secarse, puedes lijar la superficie hasta que quede completamente lisa.
Siempre será mejor el resultado en un taller especializado, pero también te costaría más caro. Si utilizas pinturas y materiales de calidad y sigues todos los pasos que te hemos dado, el resultado final debería ser óptimo. No temas cuando tengas que lijar la superficie de tu coche, forma parte del proceso para reparar el arañazo.
Por último, y muy importante, cuida siempre la limpieza a la hora de pintar. Si pintas una pieza del coche estando sucia, la pintura no se asentará bien, el resultado no será tan bueno y tardará poco tiempo en desconcharse.
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