consejos para conducir en invierno sin peligro

10 Consejos para Conducir en Invierno IMPRESCINDIBLES

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El invierno es la época del año en la que es más difícil conducir. El frío, la lluvia, la nieve, la niebla y el hielo condicionan notablemente la circulación, por ello, es necesario adaptar el estilo de conducción y tomar una serie de precauciones. A continuación, te ofrecemos diez consejos para conducir en invierno, para hacer tus viajes de la forma más segura.

Una correcta puesta a punto

El coche siempre debe estar en buen estado, pero en invierno es necesario hacer una puesta a punto en un taller de confianza con más motivo, para adaptar el vehículo a las condiciones climáticas. Es necesario controlar puntos vitales como los frenos, los amortiguadores, la batería, los neumáticos, las bujías, etcétera.

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Controla la previsión meteorológica antes de iniciar un viaje

Un consejo imprescindible para conducir en invierno es controlar el tiempo que va a hacer durante tu viaje para evitar sorpresas desagradables, como una fuerte nevada que te pille sin cadenas de nieve y te deje atrapado, o la presencia de bancos de niebla persistentes que reduzcan notablemente la visibilidad. Consulta la información del tiempo en la DGT y sigue sus recomendaciones.

Estado de los limpiaparabrisas

El estado de los limpiaparabrisas debe ser óptimo y es uno de los puntos clave del coche que hay que revisar. Piensa que, en esta época del año, es cuando más llueve, por tanto, tus escobillas deben ser capaces de barrer toda la superficie del parabrisas para garantizar la mejor visibilidad.

Por otro lado, te recomendamos que utilices un lavaparabrisas específico para el invierno, que contiene aditivos anticongelante que limpian mejor el cristal y previene la formación de hielo.

Sistema de alumbrado

Un buen alumbrado es imprescindible para conducir en invierno. Las luces deben funcionar correctamente, ya que es la época del año con menor horas de luz solar y es probable que circules con frecuencia de noche. Además, en estos meses son comunes la lluvia, nieve y niebla, fenómenos meteorológicos que reducen mucho la visibilidad y conviene conducir con las luces encendidas para ver y ser vistos por los demás usuarios de la vía.

Revisa que funcionen correctamente todas las luces de tu coche: luces de posición, cruce y largas, intermitentes, luz de freno y marcha atrás y las luces antiniebla.

Sistema de climatización

Siempre es importante conducir con un buen sistema de climatización, en cualquier época del año. Conducir con una temperatura adecuada es bueno para retrasar el cansancio y mantener toda la atención en la carretera. En concreto, en invierno, una buena calefacción evita el empañado de los cristales y, por tanto, una mejor visibilidad. Y, además, poder conducir más cómodo, sin ropa de abrigo.

Antes de iniciar un viaje en coche en invierno, controla que la climatización de tu coche funcione perfectamente y revisa el estado de los filtros y todos los componentes del sistema.

Neumáticos de invierno

Este es, quizás, el más importante de los consejos para conducir en invierno. Si resides en una zona donde hace mucho frío durante varios meses del año, debes utilizar unos neumáticos de invierno. Estas cubiertas están especialmente diseñadas para mejorar la adherencia y la tracción en invierno, al estar elaborados con un compuesto más blando y presentar un dibujo específico para evitar situaciones como el “aquaplaning”.

Los neumáticos de verano pierden adherencia y capacidad de tracción cuando la temperatura baja de los siete grados. Los neumáticos de invierno soportan las bajas temperaturas y también circulan mejor con nieve. No olvides controlar la presión y recuerda que la profundidad mínima del dibujo debe ser de 1,6 milímetros.

Estado de la batería

Otro de los puntos clave del coche es la batería. En invierno, este componente sufre más que en el resto del año, no solo porque se le exige más trabajo por el aumento del uso de más componentes y sistemas del vehículo, sino también el frío reduce su capacidad. Si tu batería tiene ya varios años, es posible que se agote si dejas el coche aparcado al aire libre, con varios grados bajo cero. Recuerda que la vida media de una batería es de cuatro años.

Controla el nivel de líquidos

Presta especial atención a los líquidos del coche, sobre todo, al refrigerante. A la hora de circular en invierno, es bueno utilizar un anticongelante para evitar que el líquido refrigerante se congele y no pueda cumplir con su función.

El sistema de refrigeración es fundamental para mantener el motor a una temperatura adecuada y funcione correctamente. Si el líquido refrigerante no puede circular por el circuito porque está congelado, provocará una avería. Existen muchos tipos de anticongelantes que pueden soportar diferentes niveles de temperatura.

Usa las cadenas

El uso de las cadenas es imprescindible si vas a viajar a una zona de montaña con nieve o a cualquier lugar donde es habitual la nieve. Pero, independientemente de si vas o no a un lugar con nieve, siempre es bueno llevarlas en el maletero, por lo que pueda pasar, ya sean unas cadenas tradicionales o unas fundas. Por otro lado, si nunca has instalado unas cadenas para nieve, te recomendamos que practiques antes de iniciar un viaje.

Accesorios en caso de avería

Por último, te recomendamos que lleves contigo siempre una serie de accesorios que pueden ser muy útiles en caso de sufrir alguna emergencia, además de los obligatorios triángulos de señalización y chalecos reflectantes. Por ejemplo, unos juegos de luces de recambio, linterna, un gato, un estuche de herramientas y fusibles de repuesto. Del mismo modo, llévate algunas mantas para protegerse del frío ante la posibilidad de quedarte atrapado en la nieve, agua y comida.

Otros consejos para conducir en invierno

A continuación, te ofrecemos algunas recomendaciones para conducir en invierno con mayor seguridad durante tu viaje:

Aumenta la distancia de seguridad

Siempre hay que mantener una distancia de seguridad con el vehículo que circula delante, pero en condiciones climatológicas adversas, es necesario aumentarla. La DGT recomienda que la distancia entre un coche y otro sea de tres segundos, que es el tiempo que se tarda en realizar una frenada de emergencia. Cuando llueve o la carretera está mojada, hay que multiplicar ese tiempo por dos.

Reduce la velocidad y circula con marchas largas

Esto va ligado al punto anterior. Con la calzada mojada, deslizante o con una visibilidad reducida, hay que reducir la velocidad. Con nieve o hielo, conviene circular con marchas largas para evitar que las ruedas motrices pierdan tracción y adherencia.

Cuando conduzcas con nieve, además de colocar las cadenas, evita las frenadas y maniobras bruscas, reduce la velocidad notablemente y aumenta la distancia de seguridad.

Cuidado con los adelantamientos

El adelantamiento es siempre una maniobra que conlleva riesgos y esos riesgos se multiplican con la calzada deslizante o con poca visibilidad. Hazlo únicamente cuando estés completamente seguro.

Ahora ya estás listo para conducir en invierno sin peligro. Para más consejos no pierdas de vista nuestro blog.