Cuando dejamos el coche aparcado al aire libre durante los meses más soleados del año solemos centrar nuestra atención en que el interior del vehículo no se caliente en exceso. Sin embargo, los rayos del sol no solo afectan de esta forma. También pueden ser perjudiciales para la parte externa del coche.
Los faros son uno de los elementos exteriores que más sufren la exposición al sol. Con el tiempo pueden volverse amarillentos y opacos, un hecho que no solo afecta al aspecto del coche, sino que también tiene efectos negativos en la visibilidad. A continuación te explicamos varias formas de pulir y limpiar los faros del coche para que tu seguridad no se vea comprometida.
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¿Por qué los faros se vuelven amarillentos por el sol?
Si hace mucho tiempo que conduces o que te gustan los coches te habrás dado cuenta de que los faros de los coches antiguos no se volvían amarillentos. Esto se debe a que estaban hechos de cristal, mientras que la mayoría de los actuales son de un plástico grueso compuesto de policarbonatos.
Los lentes actuales de plástico son mucho más duraderos y resistentes a los golpes o los arañazos, pero tienen el inconveniente de degradarse si se exponen mucho a los rayos UV del sol. A causa de esta reacción, los faros se empañan, se vuelven amarillentos y producen opacidad, de manera que la luz que se emite es menos potente y brillante.
Pulir faros de la forma más efectiva
Aunque hay algunos remedios caseros que pueden ayudarte en situaciones en las que los faros todavía no estén muy opacos, corres el riesgo de dañar tu coche. Es el caso de pulir los faros con limón, vinagre, bicarbonato o pasta de dientes.
La mejor solución es usar un kit renovador de faros. En Norauto los puedes encontrar por menos de 15 euros e incluyen todo lo que necesitas para dejar los faros como nuevos, desde lijas no abrasivas hasta esponjas y un compuesto pulidor con las propiedades ideales para la limpieza de los faros.
Si lo deseas, pidiendo cita en tu taller más cercano también puedes pedir que pulan los faros por ti. Además, de esta forma te asegurarás de que el desgaste es externo, ya que el uso de bombillas de una potencia superior a la recomendada también puede causar un desgaste de los faros por la parte interna, aunque en esos casos el color suele ser más blanquecino.
La importancia de tener unos faros limpios
Si tienes los faros amarillentos, no dejes pasar mucho tiempo hasta pulirlos. Ten en cuenta que son una parte fundamental para garantizar la visibilidad al conducir de noche o en días de lluvia o niebla.
Pon remedio a la opacidad de los faros de forma rápida, sencilla y económica. Tu coche no solo lucirá más limpio y bonito, sino que también estarás garantizando que los faros de tu coche dan toda la luz que necesitas para conducir de forma segura.