Conducir con hielo y nieve puede resultar muy peligroso. De hecho, la mayoría de los accidentes se producen en estas circunstancias. Por ello, siempre hemos de conducir con la necesaria protección en hielo. En este post te vamos a explicar las precauciones que debes tener en cuenta para circular en condiciones atmosféricas adversas.
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Detectar las situaciones de riesgo
En líneas generales, cuando el termómetro del coche baja de los 3 °C, has de extremar las precauciones. Las horas más frías del día se producen por la noche y la madrugada. Por lo tanto, cuando vayas a salir por la mañana, es muy probable que encuentres placas de hielo o escarcha. Veamos brevemente cuáles son las situaciones de riesgo más habituales.
Hielo
Las acumulaciones de nieve son más previsibles, puesto que van precedidas por un temporal, pero con las placas de hielo hay que tener más cuidado, ya que a menudo no se detectan a simple vista. No obstante, si te fijas en el asfalto con hielo, siempre tiene un cierto brillo. De hecho, es habitual que se formen en días con buen tiempo. Por tanto, pueden aparecer de forma inesperada cuando parece que la carretera está en perfecto estado.
Acumulación de nieve
Lo más peligroso de la acumulación de nieve es que la visibilidad se reduce de forma considerable. En este caso, lo más recomendable es utilizar las luces cortas y, si es posible, las antiniebla. Además, las nevadas suelen ir acompañadas de viento fuerte, por lo que pueden ser más desestabilizadoras. Aquí más consejos para la conducción durante las olas de frío.
Máquinas quitanieves
Aunque su labor de las máquinas quitanieves es fundamental para retirar la nieve acumulada, es necesario tener cierta precaución. Su paso deja en el pavimento una película de nieve dura o capa de hielo. Por este motivo, no te confíes, ya que la carretera puede encontrarse muy resbaladiza.
Zonas de sombra
También es necesario prestar especial atención a aquellas zonas donde no llega el sol, ya que pueden esconder placas de hielo. Por ejemplo, bajo los puentes, en las curvas cerradas, en entornos montañosos o en depresiones de asfalto.
Evitar los deslizamientos
En este apartado vamos a hacer un repaso a las claves para una correcta protección y conducción en hielo. Son las siguientes:
- Conducción suave: La recomendación más importante es circular con la máxima suavidad y, sobre todo, evitar los acelerones, los frenazos y los cambios bruscos de dirección.
- Utiliza marchas largas: Para subir, lo recomendable es que circules con una marcha más de la que se emplea habitualmente. El objetivo es evitar que el motor se revolucione más de la cuenta. Sin embargo, en las bajadas has de hacer todo lo contrario, es decir, usar marchas cortas para controlar el coche con el freno motor. En los coches automáticos se han de utilizar los modos winter y snow, preparados para tal efecto.
- Pérdida del control: Si en algún momento pierdes adherencia debido a las placas de hielo, lo primero que debes hacer es dejar de acelerar. Mantén el control del volante y deja el coche recuperar la adherencia poco a poco. Pero, sobre todo, no frenes de golpe. Si patina la rueda trasera, gira el volante hacia el sentido contrario. Si son las delanteras, gira el volante con suavidad en la misma trayectoria del vehículo.
Distancia de seguridad
Como sabes, mantener la distancia de seguridad es fundamental para reaccionar ante cualquier imprevisto en la carretera. No obstante, en condiciones atmosféricas adversas, como, por ejemplo, la conducción en hielo, todavía es más importante. Se trata de mantener una distancia prudencial que te permita reaccionar de acuerdo a las circunstancias de la vía para evitar una colisión.
Los dos factores que determinan cuál es distancia de seguridad adecuada son la velocidad y la visibilidad. Debes tener en cuenta que la velocidad establecida en una vía determinada no siempre se corresponde con los límites que marca la DGT. Ante una situación de circulación compleja, es necesario reducir considerablemente la velocidad habitual.
Por su parte, la visibilidad es un elemento imprescindible para frenar a tiempo. Para ello, los faros deben estar limpios y bien regulados. Recuerda utilizar las luces de cruce y las antiniebla. Por último, el limpiaparabrisas debe funcionar correctamente.
Consejos para el mantenimiento y equipación del coche en invierno
Estos son los aspectos que has de valorar para conducir en la nieve o el hielo con una óptima protección:
- Revisa los líquidos: Llena el depósito de combustible y controla el líquido de frenos, el aceite y el anticongelante. Este último evita que el radiador sufra daños con las bajas temperaturas.
- Neumáticos de invierno: El estado de los neumáticos y la profundidad mínima son dos elementos fundamentales para circular con seguridad y estabilidad. No obstante, lo recomendable en zonas muy frías es utilizar neumáticos de invierno, ya que son mucho más efectivos en el frenado. Como alternativa, cada vez ganan más popularidad los neumáticos all season. Con ellos, puedes circular tanto en verano como en invierno.
- Cadenas: Cuando se producen grandes nevadas, las autoridades pueden obligar al uso de cadenas o cualquiera de las alternativas homologadas. Hoy en día, aparte de las cadenas de metal, encontramos de tela, bridas de nailon, tipo red o de araña semiautomáticas. En cualquier caso, lo más importante es comprobar las medidas de los neumáticos y colocar las cadenas correctamente. Recuerda que se ponen siempre en las ruedas de tracción. En caso de tracción total, en las ruedas delanteras.
- Equipamientos adicionales: Cuando viajes lugares muy fríos, es aconsejable preparar un kit de prevención que incluya ropa de abrigo, una manta, guantes, batería para el teléfono y algo de comida y bebida.
La conducción responsable y el mantenimiento del vehículo son factores fundamentales para circular con protección en hielo. Si necesitas preparar tu coche para el invierno o estás pensando en viajar a lugares fríos, visita tu centro Norauto más cercano o pide cita en norauto.es. Contamos con más de 50 años de experiencia en la equipación y mantenimiento de vehículos. ¡La seguridad es lo primero!